[resumen.cl] La ex enfermera por casi 10 años de la fallecida Lucia Hiriart hoy atraviesa un duro momento. Tras años de silencio y abuso, ahora interpuso una denuncia contra la familia Pinochet, principalmente a los hijos, por perjuicio laboral y una afectación física y psíquica.
Los hijos del matrimonio hoy atraviesan una demanda desde Silvia Jara Oliver (55) por tratos vejatorios mientras ella cuidaba a la ya fallecida Lucia Hiriart. En su testimonio, expresa que tuvo que pasar abusos, acusaciones falsas de robo, enojos, falta de útiles de aseo, etc.
Marco Antonio Pinochet (64) es el principal aludido, el hijo que tenía mayor contacto con la trabajadora.Fue él quién le insinuó a Jara que ella habría robado un costoso diamante, que finalmente había sido heredado por la hija del matrimonio,Jacqueline Pinochet.
Fue el pasado 3 de mayo donde la ex cuidadora decidió interponer la denuncia contra los hijos que habían sido designados para coordinar el cuidado de la difunta Hiriart.
Una de las acusaciones más grandes en la demanda en curso es que se exigió desde Marco Pinochet firmar antes del finiquito un acuerdo de confidencialidad a la señora Silvia Jara, donde asegurará que alguna información nunca fuera revelada. Ella se negó.
Tras lo anterior, las mediaciones se llevaron a cabo con abogados de la familia.La denuncia fue principalmente por prejuicios laborales luego de que se desconociera la relación laboral que tuvieron, al no acceder al pago de una indemnización y al no cancelar sus cotizaciones. Además de una afectación psicológica y física que menciona Jara.
Un trato abusivo y decadente
Silvia comenta que su remuneración mensual era de $500 mil y que luego se repacto en $600, considerando sus funciones que eran completas; peinar, vestir, dar de comer, dar medicamentos, compañía, peinar, entre otras labores básicas.
Según se constata, habría estado en turnos de 48 a 72 horas, además de estar constantemente expuesta a los tratos de Marco Antonio Pinochet, quién la describe como una persona iracunda y que se enfurece rápidamente.
"Señalaba que no entendía la razón de tanto gasto",comenta Silvia al respecto, señalando que al acusado le desagradaba la compra de materiales de aseo, razón que detonaba su ira.
Un ejemplo de ello es que en una oportunidad el hijo de Augusto Pinochet se negó a comprar más guantes, por lo que les "advirtió" a Silivia y su compañera con la que hacían cambios de turno, que debían lavarlos.
"Hacemos hincapié en que los guantes eran utilizados para asear a la señora Hiriart, razón por la que resulta humillante y paupérrimo pedir a sus cuidadoras lavarlos para ahorrar dinero", se lee en el documento al que tuvo acceso la Tercera.
La cita es para el próximo 14 de junio, donde silvia está pidiendo una indemnización de $50,,3 millones por prejuicio a la moral y pagos adeudados.