En noviembre pasado, RESUMEN cubría en terreno y junto a la dirigenta Priscila Hernández, la concentración de basurales que conforman el desolador panorama de la Aurora de Chile, histórica población penquista cuyos habitantes acusan, está bajo total abandono. Hoy, a más de cinco años de la puesta en marcha del Plan de Regeneración Urbana y Habitacional pactado por el segundo gobierno de Bachelet, aún no ve la luz y desde la Junta Vecinal, aseguran que con la administración de Boric, el abandono se mantiene y que no existe un plan concreto de vivienda para las familias.
Por Juan Contreras Jara
Basurales, plaga de ratones, calles en pésimas condiciones y montículos de tierra, canaletas y escombros dejados tras un sector de la construcción del Puente Chacabuco que inició hace 13 años, forman parte del panorama cotidiano de los y las pobladoras de la Aurora de Chile. Además, destacan el deplorable estado de los alrededores del colegio Santa Catalina, establecimiento educacional del sector que mantiene en sus alrededores malezas y pastizales que en verano, hacen peligrar su infraestructura por los incendios.
La presidente de la Junta Vecinal de la Población Aurora de Chile, Priscila Hernández, relata que la situación es insostenible: «está en un estado deplorable, debido al abandono sistemático que ha habido desde la institución hace más de 13 años, cuando se inició el puente. Esto afecta nuestra vida cotidiana y nuestra salud mental.»
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Desde la puesta en marcha de la construcción del Puente Chacabuco, hace más de 13 años, los gobiernos de turno -explican desde la emblemática población penquista-, han ignorado su situación.
En esta línea, la dirigenta comenta: «durante el segundo gobierno de Piñera obtuvimos solo mentiras. El Serviu y la seremi (Vivienda) de la región de hace 4 años, fueron inoperantes y cada vez que hablábamos con uno, teníamos que contarles la historia de nuevo. Ahora, pensamos que con el nuevo Gobierno iba a empezar de nuevo el plan maestro y en dos reuniones que tuvimos con la seremi, nos dimos cuenta de que no había ningún apoyo por su parte».
Debido a esta situación de nulo apoyo tanto en la demanda de limpieza y remoción de escombros, como en la de plan habitacional, parte de la JJVV presionó una reunión con el ministro de Vivienda, Carlos Montes, quien se comprometió en un lapso de no más de 10 días, a responder sobre el inicio de dichos trabajos.
El Puente Chacabuco y el despojo de una población con más de 100 años de historia
Tras el terremoto del 27 F, Piñera anunciaba pomposamente la construcción del Puente Chacabuco, obra vial que brindaría un puente más de conexión entre las comunas que separa el rio Biobío, pero nada se hablaba del despojo que dicha obra ha generado al interior de la Población Aurora de Chile, con 131 años de historia.
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Tras los primeros trabajos y el abandono constante del proyecto por parte de constructoras como Claro Vicuña, la última en dejar las faenas por quiebra, las y los pobladores en algunos casos han debido abandonar sus hogares por la utilización de franjas de terreno para la construcción del puente que a la fecha aún no se terminan.
Por otro lado, los trabajos que sí se han concretado, han dejado a su paso escombros, basura, montículos de tierra, entre otros, afectando la calidad de vida de los y las habitantes de la Aurora de Chile.
En este sentido, Hernández acusa que: «los terrenos de la Aurora ya se están vendiendo a privados y el proyecto para 131 familias, es insuficiente». Debido a esta situación de abandono, desde la organización vecinal exigieron al gobierno de Boric, «que de una vez por todas se termine la solución habitacional para todos los habitantes de la Aurora, sin fragmentar la población, como lo está haciendo el Serviu nuevamente, dejando casi a la mitad de las familias sin solución. Estamos cansados de cómo estamos viviendo».
En estos 13 años de tira y afloja por parte del MOP, desde la Junta Vecinal de la histórica población afirman que, » nos ha hecho cargo de los sitios eriazos que dejaron. En la calle Andres Bello teniamos adoquines patrimoniales y se los robaron, se inunda la calle y nadie la arregla. Esta es una deuda que tiene el Estado con la Aurora de Chile.»
«Este proyecto de regeneración urbana, durante el segundo gobierno de Bachelet, venía a compensar la deuda histórica con los habitantes de la Aurora, con participación y viviendas, pero hoy nadie se quiere hacer cargo de eso. El gobierno pasado se lavó las manos y la seremi en la región estaba haciendo lo mismo», concluyó la dirigenta vecinal.