Si bien los despidos se detuvieron al interior de la papelera Softy, filial de CMPC en Puente Alto, únicamente gracias a las movilizaciones llevadas adelante por los trabajadores, desde la empresa les comunicaron que no reintegrarán a ninguno de los despedidos.

Por Juan Contreras Jara

La intransigencia sigue siendo la tónica al interior de la empresa Softy, pese a que sus trabajadores llevan más de una semana movilizándose contra el despido de más de cien de sus compañeros. Este jueves se reunieron representantes de los sindicatos y de la papelera, desde donde les comunicaron que solo aumentarán los montos del finiquito, pero no reintegrarán a nadie.

Pese al supuesto aumento del finiquito, de igual forma quedarían decenas de familias y trabajadores con años de servicio a la deriva, en medio de las alzas en los costos de la vida y el insuficiente aumento del sueldo mínimo por parte del Gobierno

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El jueves pasado, los trabajadores movilizados lograron concertar una reunión con representantes de Softy, filial de CMPC (familia Matte) en Puente Alto, desde donde cerraron cualquier posibilidad de reincorporación, pese a las denuncias por posible despido injustificado que se están empezando a acumular en la Inspección del Trabajo contra la papelera.

Roberto Canales, parte del sindicato N°2 de Softy, comentó a Resumen que, «tras la reunión la respuesta no fue positiva. La gerencia está de acuerdo en aumentar el monto del finiquito, lo que no nos parece justo, nosotros queremos la reincorporación».

Actualmente Softy, ha incurrido en 50 despidos al interior de su sucursal de Puente Alto y sesenta más en las dependencias de la empresa en Talagante. La gerencia de la empresa, filial de CMPC en la región Metropolitana, se ha excusado en una supuesta baja de ventas para efectuar lo que calificaron como reestructuración al interior de la papelera.

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Lo anterior fue refutado por el dirigente sindical, quien explicó que, en su calidad de inspector de calidad, «yo reviso los productos que han llegado y no es cierto su argumento. Efectivamente han detenido algunas líneas, pero la empresa dejó de arrendar bodegas y se llenó con sobre productos, por lo que hoy están trabajando con las bodegas que tienen en la planta, pero el ritmo de producción no ha bajado. No hemos sido parte de ninguna de sus ganancias, al contrario, nos han sobrecargado con 12 horas en el trabajo. Fuimos desechables y como trabajadores estuvimos al 100% durante la pandemia».

Los trabajadores de Softy se encuentran actualmente ingresando denuncias por despidos injustificados en la Inspección del Trabajo, a través de un mismo abogado, visionando una demanda colectiva y lograr así la reintegración de los despedidos.