Un nuevo conflicto socioambiental tiene a Forestal Arauco como protagonista en el sector rural La Orilla en la comuna de Quilaco, provincia del Biobío. Vecinas y vecinos denunciaron a la empresa parte del grupo Angelini por fumigar predios forestales con plaguicidas a base de glifosato, químico altamente nocivo, afectando su salud y su ambiente.
Juan Contreras Jara / resumen.cl
En Quilaco, al menos seis familias en la localidad de La Orilla, completamente rodeada de plantaciones forestales, han sido afectadas con la utilización de este agrotóxico por parte de Forestal Arauco. Lo anterior ha implicado daños en cultivos particulares agrícolas y afectaciones a la salud de las y los habitantes del sector, además del empeoramiento de caminos rurales debido al tránsito diario de camiones saliendo y entrando a las faenas forestales.
Desde la comunidad afectada indicaron que no hay fiscalización efectiva de alguna institución acerca de las consecuencias de las fumigaciones en sus territorios.
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Desde Forestal Arauco reconocieron que en la faena de fumigación del pasado 10 de noviembre la aplicación de este plaguicida constituyó un error de procedimiento y responsabilizaron a la empresa contratista de la faena sobre lo sucedido. "Se le dijo que no se iba aplicar más en este sector pero la empresa de servicio a cargo de esta cuestión, por un tema de viento, se fueron a aplicarlo a otro lugar y se equivocaron. Apenas el jefe de área se dio cuenta de este error paró la faena y se le pidieron las disculpas del caso a la persona», indicaron desde la empresa.
Sobre este episodio Catherine Hernández, pobladora del sector, plantea una situación diametralmente distinta. Explica que los monocultivos de pino emplazados por Forestal Arauco en el sector están a escasos 30 metros de su vivienda, y que además hace un año fue instalado frente a ella un centro de acopio de madera.
Un día llegó hasta su domicilio un guardabosques de Forestal Arauco, solicitándole firmar una ficha de consentimiento sobre la aplicación de herbicidas cerca de su vivienda, pero sin permitirle ni siquiera leer dicho documento técnico primero.
"Él no me quería dar la información de lo que estaban aplicando hasta que yo no le firmara la ficha. Querían el consentimiento de que yo había sido avisada pero sin antes darme la información de lo que iban a aplicar. Vinieron sin ningún folleto sobre intuiciones, ni permisos de la Seremi de Salud" señaló Catherine. Al ser interpelado la vecina asegura que el guardabosques de Forestal Arauco se rio de ella.
La vecina se percató de que la empresa estaba aplicando herbicidas luego de cosechar los pinos desde los predios forestales.
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"Como ellos tienen invadido acá con plantaciones forestales, tienen chipe libre de hacer lo que quieran. Hay ruido de tala de árboles todos los días, durante toda la semana y lo mismo ocurre con el tránsito de camiones", fustigó la vecina.
Hastiada por estas situaciones, Catherine se comunicó con un representante de Forestal Arauco quien le habría indicado a la pobladora que fumigar con glifosato "era como si echara Raid en mi casa", comentó la afectada.
Utilización de herbicidas con glifosato en Quilaco y la respuesta de Forestal Arauco
El producto utilizado por Forestal Arauco para fumigar sus cultivos luego de las faenas de cosecha se llama Titán S.G, compuesto químico en base a glifosato monoamonio.
En las especificaciones de uso del Titán S.G emanadas desde el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) detallan, entre otros, que "no se debe aplicar el producto con viento. No respirar la niebla de aspersión. Evítese el arrastre por el viento a cultivos vecinos". Lo antes descrito es lo que acusan ha infringido Forestal Arauco en La Orilla.
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"Mis hijos nunca se me enferman y el otro día cuando ellos hicieron la aplicación, que fue en la mañana y hubo viento, mi hijo mayor presentó diarrea a las dos horas después y a mi hijo menor de dos años y 10 meses que jamás le había dolido el estómago, ese día lloraba de dolor. Yo estaba con dolor de garganta y los ojos muy enrojecidos", explicó Catherine.
Sumado a esto, la pobladora se refirió a las afecciones en sus cultivos particulares. "Nosotros tenemos siembras de tomate y después de que aplicaron este herbicida comenzaron a decaer, a ponerse feos y eso pasó con todos mis cultivos".
Enfatizó en que no han cumplido los protocolos en Quilaco. "No existe una consecuencia de parte de ellos de que cumplan con avisarle a los vecinos, de ir a la Seremi con su ficha de lo que van a aplicar o de demarcar las zonas sensibles. Mi casa está a 30 metros, caminas 30 pasos y está la forestal. Se supone que después de una aplicación no pueden volver personas al predio por lo menos en 3 horas y ese día el encargado de la faena andaba sin mascarilla, ni guantes, con su ropa normal".
Una de las familias afectadas apuntó a que Forestal Arauco estaría ignorando el decreto 158 del Ministerio de Salud sobre las condiciones para la seguridad sanitaria de las personas en la aplicación terrestre de plaguicidas agrícolas.
Dicha normativa recalca "la necesidad de regular la aplicación terrestre de plaguicidas agrícolas, en lo que se refiere a las condiciones de seguridad necesarias para el resguardo de la salud y la integridad física y sanitaria de las personas que ejecutan esas actividades y de aquellas que viven en los alrededores del lugar de aplicación o pueden recibir sus efectos".
Glifosato: herbicida ampliamente cuestionado a nivel global
A nivel de la agroindustria global se desarrolla un conflicto en el que en algunos países se buscan establecer principios precautorios ante la incertidumbre con respecto a daños en la salud, mientras que otros países se busca validar y mantener el uso de este herbicida. Mientras organizaciones campesinas, centros de investigación y estudios independientes establecen una serie de impactos ambientales graves de los agroquímicos para la salud y el ambiente, las propias empresas fabricantes, instituciones de investigación afines, junto a gobiernos y organizaciones internacionales, buscan mantener su uso.
Un estudio de 2018 concluyó que hay un enlace convincente entre la exposición a herbicidas basados en glifosato y el incremento en el riesgo del cáncer en el sistema inmunológico linfoma no-Hodgkin.
Mientras tanto, un estudio de 2020 evaluó la contaminación en los acuíferos argentinos, demostrando cómo la aplicación de décadas con el modelo agrícola-industrial predominante «excedió el potencial de degradación del suelo y la zona no saturada, causando la contaminación del agua subterránea».
En la misma línea, nuevas investigaciones apuntan a que el glifosato podrían afectar a los microorganismos que facilitan el proceso digestivo humano.
Una nueva investigación recientemente publicada agregó evidencias en torno al potencial del glifosato para afectar el sistema endocrino humano.
Recientemente, la propia Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, indicó en un reporte preliminar que el glifosato tiene el potencial de dañar especies en riesgo de conservación y su hábitat.
Reunión de la comunidad con representantes de Forestal Arauco
Tras las denuncias presentadas a la entidad FSC y a la Seremi de Salud, Catherine Hernández pudo reunirse con un representante de la empresa el sábado pasado al medio día.
En cuanto a la reunión, la afectada relató que "lo que quieren hacer para mitigar en parte el daño que han causado es hacer una zona buffer [es decir, de amortiguación], que consistiría en plantar nativo sobre sus plantaciones, pero eso aún está en veremos. Quedaron en transcribir y hacer un estudio con la propuesta. Lo que sí, me dejo claro que solo lo harían en frente de mi casa".
La vecina explicó que desde Forestal Arauco le bajaron el perfil al uso del glifosato aludiendo a que Catherine y las y los pobladores de La Orilla consumen glifosato en los alimentos. "Ellos creen que sus productos no derivan ninguna problemática en la salud de las personas. Yo les dije que no es lo mismo que me coma una manzana a la que le echaron glifosato a que tu vengas a aplicar glifosato y con el viento todo ese producto me llegue a mí".
Por lo pronto la pobladora y la comunidad afectada en La Orilla deberán esperar la propuesta de Forestal Arauco que sería a largo plazo. En el corto plazo Catherine Hernández expresó que no quedaron en nada.