[resumen.cl] De parte del Coordinador Eléctrico Nacional informaron que la situación de los mínimos niveles de nieve y baja en precipitaciones afectará la producción de hidroelectricidad, por lo que no descartan posponer el cierre de la termoeléctrica Bocamina II, como tampoco reabrir Ventanas 1 ubicada en Puchuncaví.

A fines de la semana pasada Juan Carlos Olmedo, presidente del Consejo Directivo del Coordinador Eléctrico Nacional, informó la posibilidad que Bocamina II, termoeléctrica que se encuentra operando en Coronel, posponga su cierre apelando a la situación que enfrentan otras formas de generación de energía en el país.

Concretamente, Olmedo apuntó a que la profundización de los mínimos niveles de nieve y baja en precipitaciones es un fenómeno que «afecta significativamente la disponibilidad de generación hidroeléctrica», por lo cual han apostado por la posibilidad de posponer cierres de termoeléctricas como también reabrir otras, como lo es el caso de Ventanas 1 en Puchuncaví.

Vertedero de Carbón

La intención ha sido profundamente rechazada por la población, la cual cuenta con antesala la reciente desconexión de Bocamina I el pasado 31 de diciembre tras una histórica lucha levantada en defensa de la salud de las personas y frenar los efectos medioambientales.

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Asimismo, la iniciativa iría contra el proceso de descarbonización abordado mediáticamente por los Gobiernos, el cual contemplaba cerrar Bocamina II en mayo de 2022.

Sin embargo, la falta de hidroelectricidad ha reabierto la intención de optar por generación de energía en la misma lógica contaminante que anteriormente, la misma que arrastra décadas de contaminación y daños en la salud de la población, de los cuales no se han declarado responsabilidades concretas pese a los sondeos que han mostrado altas concentraciones de metales pesados en niñas y niños de la escuela Rosa Medel, justo al lado de la termoeléctrica Bocamina I y II.

El proprio Juan Carlos Olmedo planteó que la decisión definitiva deberá esperar a los próximos reportes de pronósticos de hielo que reciban para poder establecer definitoriamente los plazos de funcionamiento y/o reapertura de termoeléctricas a carbón para la generación de energía, pese a la diversidad y amplia carga de producción que Chile mantiene en este ámbito.