Durante la madrugada de este domingo 27 de junio, falleció en Santiago de Chile, el legendario académico, escritor, dirigente sindical y militante de izquierda, Luis Vitale Cometa, quien se encontraba afectado de una incurable dolencia desde hace algún tiempo.

Vitale argentino de nacimiento, descendiente de inmigrantes sicilianos, llegó a Chile a trabajar como obrero en una fábrica de jabón en Santiago, para luego pasar a dos empresas químicas, ya en 1958 era dirigente de la Federación de Química y Farmacia, desde allí entró a la dirección de la recién fundada Central Única de Trabajadores (CUT), junto a grandes amigos a quien admiraba enormemente: Clotario Blest y Humberto Valenzuela. En aquellos años Vitale participaba activamente en el trotskista Partido Obrero Revolucionario (POR).

A mediados de la década del 60 junto a un grupo de legendarios dirigentes sindicales, trotskistas y anarco sindicalistas comenzaron a trabajar por un proyecto que uniera a la izquierda revolucionaria, así Vitale, junto a Blest y Valenzuela, participroan junto a una nueva generación de jóvenes rebeldes, influenciados por la revolución cubana, en la formación del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, (MIR) el año 1965, del cual formara parte de su dirección. Dentro de estos jóvenes rebeldes destacaba un grupo de estudiantes de Concepción, entre los que se encuentraban Luciano Cruz, Miguel Enríquez y Bautista Van Schowen, hacia este último Vitale guardaba siempre un especial cariño y admiración, elloos lo convencerán para trasladarse como Académico hasta la universidad de Concepción, donde Vitale se transformó en formador de muchos cuadros políticos de dicha organización, ya que a las clases en la Universidad, Vitale sumó los cursos de formación política para obreros industriales y mineros del carbón de la zona. Son los años de su clásica obra «Interpretación Marxista de la Historia de Chile».

Tras el golpe militar, la detención, la tortura y los campos de concentración, Vitale es rescatado desde el campo de prisioneros de Chacabuco por el gobierno alemán, gracias a gestiones de destacados académicos de la prestigiada Universidad de Frankfurt.

Durante el exilio, Vitale peregrinó dictando conferencias y charlas por diversas universidades de Europa, formando parte de los comités de apoyo a la resistencia popular chilena.

En 1977 retornó a Latinoamérica, fue siempre un gran promotor de la causa Latinoamericana, siendo profesor de la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde escribió su «Historia General de América Latina» de 9 tomos, y partir de allí, una serie de Historias comparadas de nuestros pueblos, siendo la última de ellas «De Bolívar al Che, la larga marcha por la unidad y la identidad latinoamericana».

Pero Vitale no solo se volcó a escribir sobre la Historia de Chile y América Latina, fue uno de los precursores de la historia de la mujer, del deterioro medioambiental, escribió también sobre teoría política y filosofía de la historia, entre otros temas. Además de las Universidades nombradas, también dictó clases en la Universidad Técnica del Estado, Universidad Goethe de Frankfurt, Universidad Nacional de Bogotá, Colombia, Universidad Río Cuarto de Córdoba, Argentina, y fue Profesor Doctor Emérito de la Universidad de Groningen, en Hamburgo.

Tras su retorno del exilio Vitale trabajó por la reconstrucción de la izquierda revolucionaria, entre el 93 y el 95, tomó partido por un nuevo movimiento revolucionario y participó en diversas cátedras libres que pretendían romper la hegemonía dictatorial que aún perduraba en las universidades chilenas, siempre instó a los estudiantes a luchar por la democratización de las universidades, poniendo los ejemplos de la reformas universitarias en América latina en 1918 y 1968 . Así, al igual que el también recientemente fallecido ex rector de la UBB, el geógrafo humano Hilario Hernández, impartió clases gratuitas en programas organizados por el centro de alumnos de historia y geografía de la Universidad de Concepción.

Vitale fue parte de una generación de historiadores marxistas, junto a Julio César Jobet y Hernán Ramírez Necochea, que hizo escuela en nuestro país, la cual jamás ha sido reconocida y que con la muerte de Vitale, perdió toda posibilidad de recibir ese reconocimiento. Sin duda Vitale debió haber recibido el premio nacional de Historia, su consecuencia política le negó ese hecho.

Los restos de Luis Vitale serán velados en la sede capitalina de la Sociedad de Escritores de Chile, Simpson 7, Providencia, desde las 13:00 hrs. del domingo 27 de junio.