Hijo de condenado exalcalde Marcelo Rivera es nombrado seremi de Hacienda en el Biobío
[resumen.cl] Durante la tarde de ayer jueves fueron anunciados los nombres de 13 seremis para la Región del Biobío. Entre ellos destaca el del PPD Sebastián Rivera en Hacienda, parte del llamado «riverismo» al ser hijo de Marcelo Rivera, exalcalde de Hualpén condenado por fraude al fisco, lavado de activos y cohecho, además de diversos testimonios que lo vinculan con el narcotráfico.
Durante la tarde de este jueves se dio a conocer quiénes ocuparán las secretarías regionales ministeriales en el Biobío, 13 nombres en que destacan los partidos de la ex Concertación y que se suman a los ya conocidos de Educación y Salud, por lo que la lista del gabinete regional es la siguiente:
- Agricultura: Pamela Yáñez (Convergencia Social)
- Bienes Nacionales: Cristian Cerro (Acción Humanista)
- Deporte: Andrea Saldaña (Federación Regionalista Verde Social)
- Energía: Daniela Espinoza (Independiente)
- Gobierno: Eduardo Vivanco (Partido Radical)
- Desarrollo Social: Hedson Díaz (Partido Socialista)
- Transporte: Claudia García (Comunes)
- Mujer: Lorena Segura (Independiente)
- Obras Públicas: Hugo Cautivo (Partido Socialista)
- Hacienda: Sebastián Rivera (Partido por la Democracia)
- Trabajo: Sandra Quintana (Partido Comunista)
- Minería: Roberto Lagos (Partido Ecologista Verde)
- Medio Ambiente: Oscar Reicher (Revolución Democrática)
- Educación: Héctor Aguilera (Independiente)
- Salud: Eduardo Barra (Partido Comunista)
De los nombres, inmediatamente llamó la atención el del PPD Sebastián Rivera, nuevo seremi de Hacienda, pues se trata del hijo de la actual presidenta regional del partido en el Biobío, Alicia Yáñez, y del recordado exalcalde de Hualpén, Marcelo Rivera, condenado en octubre de 2013 -luego de cumplir la cautelar de prisión preventiva en la cárcel El Manzano- a poco menos de tres años de prisión y al pago de millonarias multas e indemnizaciones por los delitos de fraude al fisco, lavado de activos y cohecho.
En aquella ocasión también fueron formalizados cercanos a la red política del entonces alcalde: el concejal Miguel Rivera, su hijo y hermano del nuevo seremi; el jefe de comunicaciones del municipio, Eduard Jara; el secretario municipal, Nelson Cuevas; el director de Obras, Gastón Sanhueza; el jefe del Departamento de Personal, Mario Gutiérrez; el director del Departamento de Aseo, Ornato y Medio Ambiente, Patricio Garrido; y el director de la Secretaría Regional de Planificación y Coordinación, Miguel Peña.
La caída de Rivera se dio luego de la detención de El Martillo (Reinedio González) condenado por narcotráfico y otros delitos en la comuna de Hualpén. Cuando fue detenido, la prensa local consciente del vínculo estrecho entre ambos -habían sido amigos y vecinos desde niños, cuando vivían muy cerca en un pasaje en el antiguo Hualpencillo-, le consultó sobre este punto a lo que el entonces alcalde afirmó que él no conocía a El Martillo y que la justicia debía hacer su tarea. Al día siguiente en la puerta de su apareció clavada una corona fúnebre de flores.
El vínculo era tal que el Fiscal a cargo del caso de investigar la red de narcotráfico, Julio Contardo -actual fiscal regional del Maule-, con copas de más en una fiesta confesó que tenían intervenido el teléfono de Rivera y que estaban tras él, por lo que fue advertido rápidamente por uno de sus cercanos presente en el lugar y que escuchó la etílica confesión.
A pesar que la condena le impedía ser candidato, puso a una representante suya al sillón municipal de Hualpén para las elecciones de ese año, presentando a su secretaria Fabiola Lagos como candidata, quien pese a obtener la victoria, fue Rivera quién hizo el discurso del triunfo.
Desde entonces el llamado «riverismo» -como se denomina a la red de familiares y cercanos al exalcalde- se ha mantenido como una fuerza política con presencia en Concepción, aunque cada vez menor. O eso parecía, porque el nombramiento en la Seremi de Hacienda de Sebastián Rivera es un recordatoria que las redes de influencia regionales siempre pueden dar una sorpresa.
