Bajo la implementación del "Plan Fortalecimiento Industrial del Biobío" en septiembre, se anunciaron una serie de medidas por parte del Gobierno que implican, entre otras cosas, un aumento en la cantidad de monocultivo de pino y eucalipto en la región. RESUMEN se contactó con Lucio Cuenca, director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales, para conocer su punto de vista respecto al plan publicado por el Gobierno.
Por Valentín Jara Persoglia
El «Plan de Fortalecimiento Industrial del Biobío» ha despertado controversia entre diferentes sectores de la región, particularmente por su enfoque en la expansión de actividades que muchos consideran extractivistas. Para comprender las implicaciones de este plan y su impacto en la sostenibilidad ambiental y social de la región, RESUMEN conversó con Lucio Cuenca, director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA). En esta entrevista, Cuenca nos ofrece su visión crítica sobre cómo este tipo de políticas industriales, especialmente la expansión forestal, podrían agravar los problemas medioambientales y sociales ya existentes en Biobío.
Resumen (R): ¿Qué relación hay entre la expansión forestal y los incendios y como podría en este sentido aumentar la exposición a estos eventos con el plan del Gobierno?
Lucio Cuenca (LC): Antes de entrar al tema forestal, con el plan de fortalecimiento en general, de alguna manera se aprovecha una situación del cierre de Huachipato para instalar en la agenda regional nuevamente el reimpulso de una serie de actividades, que más que actividades industriales, son actividades que buscan profundizar la acción extractivista en la región. Salvo algunos anuncios que tienen que ver con el uso de nuevas tecnologías, las medidas de mediano plazo que van adjuntas al plan de emergencia del cierre de Huachipato, son restablecer la agenda extractivista que la región ya tiene, que viene desde hace varios años atrás.
Eso significa restablecer en la agenda una serie de proyectos que han sido altamente cuestionados por la población de la región, y en el caso específico del tema forestal, hay evidencia científica de que hay una relación entre la intensidad del monocultivo forestal y la voracidad y las consecuencias que han tenido los incendios forestales en la Región del Biobío, siendo una de las regiones que tiene el más alto porcentaje territorial de monocultivo forestal.
Hay informes del CR2 (Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2), hay informes internacionales, hay informes de profesionales de la academia de la Región del Biobío, de la Universidad de Concepción, que han demostrado que hay una relación directa entre la intensidad y el volumen del monocultivo forestal con lo que ha pasado con los incendios en los últimos años, entonces no es una conjetura, no es una especulación, hay evidencia de que existe una relación directa entre ambas cosas.
Quizás te pueda interesar: Como si la minera fuera poco: plan de reconversión del gobierno por cierre de Huachipato impulsa los tentáculos del Proyecto Octopus
R: ¿Cómo afectará la expansión forestal sobre el suelo y los recursos hídricos?
LC: Hay también ciencia e investigaciones que demuestran el impacto que tiene el monocultivo en la erosión de los suelos, en el alto consumo de agua que genera el modelo forestal, y hablo de modelo forestal porque no es [solo] un problema del tipo de árbol. También es un problema del tipo de árbol, pero sin duda es el modelo de monocultivo intensivo, es decir, de miles de árboles por unidades de superficie, que aceleran una serie de procesos que en la naturaleza se dan manera mucho más gradual, y eso precariza las condiciones del terreno y hace que los impactos se vayan agravando.
El impacto se da tanto a nivel ambiental como también hacia la población, por la erosión de los suelos, por la pérdida de fuentes de agua, a nivel social por los empleos precarios, por las condiciones que impone el monocultivo forestal a los vecinos desde el punto de vista del uso de plaguicidas y de los problemas hídricos. Entonces, hay una cantidad de impactos sociales y ambientales que ya son reconocidos y que están asociados directamente al monocultivo forestal, que, al hacer crecer la cantidad de superficie de monocultivo, son impactos que se van a multiplicar en la región y que hoy, en condiciones de emergencia climática, son riesgos mucho más altos para el territorio de esa región y de las regiones aledañas donde se pretende seguir expandiendo este monocultivo.
R: En esa línea, ¿cuál es el impacto social que conlleva el monocultivo intensivo en la región?
LC: La precarización de las condiciones del suelo, la erosión y la pérdida de las fuentes de agua, ya genera un impacto hacia los vecinos del monocultivo, afecta las posibilidades de desarrollar actividades agrícolas, ya que, quien quiera desarrollar una actividad agrícola sana sin uso de plaguicidas, se ve afectado por el uso de los plaguicidas que usan masivamente las empresas forestales para mantener la lógica industrial del monocultivo. Por lo tanto, le transfieren impactos de un modelo químico hacia los vecinos e impiden que se pueda desarrollar una agricultura sana.
También afectan las condiciones de salud de la población, ya que son sustancias tóxicas que tienen efectos sobre la salud, pero también tienen efectos sobre los animales de corral, tienen efectos sobre las abejas, por lo tanto, en muchos casos, los impactos del paquete químico que usan las empresas forestales terminan afectando. Hace poco hubo un fallo judicial de la Corte Suprema que le dio la razón a un apicultor frente al uso indiscriminado de plaguicidas en el caso de las empresas forestales, entonces hay múltiples efectos sociales y a la salud de la población que se derivan de la expansión del modelo de monocultivo forestal.
Puedes ver también: Una invasión se expande por el País Vasco: El monocultivo de eucalipto y pino
R: ¿Qué alternativas a la explotación forestal existen para generar industrias sostenibles en el Biobío tras el cierre de Huachipato?
LC: Yo creo que lo primero que hay que hacer, es que estos temas los tienen que conversar los distintos componentes de la sociedad en la región. Lo que se hizo aquí previamente, es que el Ministerio de Economía se reunió con los gremios empresariales y con algunos sindicatos directamente afectados por la situación de Huachipato, pero se discutieron y se instalaron medidas que tienen que ver con una afectación mucho mayor a la región.
Creo que lo básico, lo mínimo, es que acá el Gobierno debiera abrir un debate mucho más amplio respecto a la estrategia económica y de desarrollo para la región. Sin duda, allí podrán haber respuestas mucho más razonables que las que está activando el Gobierno con este plan, porque detrás de los que fueron consultados, lo que hay son intereses económicos para que se mantenga la estrategia económica neoliberal, que ya lleva décadas en Chile y ya sabemos cuales son sus consecuencias.
Lo primero que hay que hacer acá es involucrar al conjunto de la población de la región, para que, de manera democrática, se puedan tomar decisiones y que el Gobierno las apoye y los subsidios y los distintos programas que se vayan a implementar sean medidas de mediano y largo plazo para resolver las problemáticas derivadas del cierre de Huachipato.
Mira también: Negocio redondo para CAP y Aclara tras cierre de Huachipato: Plan del gobierno favorece minería de tierras raras
Acá se esta usando la situación de Huachipato, asi como la misma empresa CAP y la minera Aclara, están usando la situación para desarrollar un nuevo negocio que va a ser mucho más rentable y cierran Huachipato con la excusa del impacto del acero chino, pero en el fondo lo que están buscando es generar condiciones para un nuevo negocio, que para ellos va a ser mucho más beneficioso. Ellos cuando toman esta medida no están pensando en los trabajadores, le están transfiriendo a la sociedad de la región un problema que el Gobierno, lamentablemente responde a través de este plan que lleva en su interior una serie de medidas extractivistas que ya han sido rechazadas por la población de la región.
Yo no tengo la respuesta de cual es la alternativa, lo que creo es que hay suficiente conocimiento y capacidad en la región para definir democráticamente las opciones que se quieren tomar para el futuro de esta región, y no hacer estos planes que en el fondo pasan a ser el caballo de Troya de una estrategia neoliberal que ya venía en desarrollo desde algunas décadas atrás.