[resumen.cl] Al mismo tiempo que potencian la hambruna, la cruel arma de guerra que el régimen sionista usa para diezmar al pueblo palestino, sus tropas atacan directamente la escasa producción alimentaria palestina. Este viernes, fuerzas de ocupación israelíes asaltaron agricultores y les impidieron la cosecha de olivos en el pueblo de Kafr Qaddu, al este de la ciudad de Qalqilya en la Cisjordania ocupada.
Fuentes locales citadas por la agencia palestina WAFA indicaron que los soldados atacaron el campo de olivos, cercano a un asentamiento colonial ilegal.
Allí las tropas retuvieron a los agricultores desde la madrugada hasta la tarde, impidiendo que realizaran la cosecha de olivos. Los soldados requisaron el carro de cosecha de aceitunas de un agricultor, rompiendo las bolsas de su cosecha y arrojándolas al suelo.
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Desde el inicio del genocidio en Gaza y al mismo tiempo que el régimen de Tel Aviv amenaza con «convertir al Líbano en una nueva Gaza» presiona con más represión, encarcelamientos, asesinatos selectivos y demoliciones de casas en la Cisjordania ocupada por su ejército.
En la mañana de este viernes, fuerzas israelíes atacaron dos poblados cerca de Nablus en la Cisjordania ocupada. Los soldados sionistas allanaron varias viviendas generando gran destrucción y robo de dinero y pertenencias en estas.
Cabe recordar que en el actual genocidio o limpieza étnica en curso contra el pueblo palestino se han intensificado las carencias alimentarias, médicas y de todo tipo debido al despiadado corte deliberado de suministros por Israel, que controla todos los accesos a la Franja de Gaza y a Cisjordania.
El hambre ha comenzado a ser una de las armas más crueles utilizadas por Israel contra el pueblo palestino atrapado en Gaza, en lo que resulta ser la masacre más grande de la que ha sido testigo la humanidad en el último siglo. Esta hambruna provocada por Tel Aviv ha incrementado el número de muertes y enfermedades muy por encima de la cifra oficial de 42 mil muertes y 98 mil heridos/as.
El pasado mes de julio, un artículo publicado en la revista The Lancet apuntó al hecho de que la cifra de muertes indirectas sería muy superior. Esto debido a la estimación de que por cada muerte directa, ya sea por bombardeo o ejecución arbitraria, se deben agregar 4 muertes más de manera indirecta, ya sea por las carencias de insumos médicos, las heridas y las enfermedades no tratadas, las carencias alimentarias y otros factores.
Imagen principal: Archivo. Extraída de WAFA. CRÉDITOS FOTO: JAAFAR ASHTIYEH.