Con movilizaciones al ingreso de la planta siderúrgica y en sus alrededores, una de ellas reprimida por Carabineros, partieron este lunes las protestas de trabajadores contratados y subcontratados de Huachipato, luego de que su directorio confirmara el cierre de sus operaciones de forma indefinida. Desde distintos sindicatos del área productiva de la provincia apuntan a una competencia desleal de la producción de acero chino, que llegó a ser un 40% más barata que la nacional, y a la falta de una propuesta de mayor salvaguardiia por parte del Gobierno, que estaría 10 puntos por debajo del mínimo solicitado por los trabajadores.

Con movilizaciones y el anuncio de un paro comunal en Talcahuano, la situación de la Compañía Siderúrgica Huachipato (CSH) y de los 22 mil trabajadores -contratados y subcontratados- sigue a la espera de la propuesta que pueda emanar desde el Gobierno este miércoles, con la llegada del ministro de Economía, Nicolás Grau, al Gran Concepción. 

La situación ha generado revuelo en la comuna puerto, por ejemplo, en el el concejo municipal de Talcahuano, instancia que busca presionar un paro comunal, mientras desde el gremio portuario ya se articulan a nivel sindical, exigiendo una propuesta que vaya en la línea de asegurar la compra de acero nacional para la construcción de infraestructuras mayores. 

Gabriel Rebolledo, vocero de la Unión Portuaria Comunal Talcahuano San Vicente, declaró que «estamos muy nerviosos por la situación que está ocurriendo en Huachipato. Tenemos sindicatos que trabajan directamente en la empresa y que se están viendo muy afectados. Ya tenemos un sindicato que cerró el Muelle Sur hace bastante tiempo y hoy día tenemos la amenaza del cierre del Muelle Norte, donde se bajaría a cinco turnos. Tenemos los datos que serían cinco turnos mensuales y con eso no vive nadie. Entonces, efectivamente, estamos coordinando ciertas movilizaciones, tanto a nivel portuario, como portuario comunal, como a nivel del cordón industrial».

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Además de las protestas protagonizadas por distintos sindicatos, durante la mañana de este lunes se reunieron en la Delegación Presidencial autoridades municipales y representantes de los sindicatos de Huachipato, quienes apuntaron a aumentar la salvaguardia, al menos del 25%, 10 puntos más que lo propuesto en primera instancia por el Gobierno.

Tras la reunión, el presidente del Sindicato N° 1 de Huachipato, Héctor Medina, se refirió a los porcentajes que tendría que llegar la salvaguarda (entre el 25 y 33%) y a que «el ministro Grau tiene más que claro el planteamiento de la organización sindical y con eso evitamos el cierre de la siderúrgica y se mantiene el giro. Ese es el camino para resolverlo ahora. Lo hemos repetido hasta la saciedad, es un porcentaje que es a nivel internacional, los 54 países que le han hecho la reclamación a China tienen 25, 22 y 33 (de salvaguarda), o sea, no estamos fuera».

Quien también se refirió a la situación fue la diputada María Candelaria, quien expresó que, «estamos trabajando con los abogados de nuestro comité para presentar una reforma constitucional en la cual se le pueda dar una participación del Estado en todas las empresas que están recién apareciendo en línea. Son importantes para la economía de nuestro país y también para salvaguardar lo que se nos vienen más adelante».

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Sobre el futuro de las movilizaciones ante el cierre de la siderúrgica, Alejandro Garrido, presidente del sindicato MAVE, del muelle CAP, expresó que, «la condición en el muelle es crítica, nosotros en estos momentos estamos trabajando con un buque mensual, ya los buques de carbón y granza los bajaron, ya no vamos a recibir más materia prima para hacer acero. Entonces, en estos momentos es crítica la situación en el muelle, como trabajadores estamos preocupados y en alerta en caso del pronto cierre de CAP, si es que no llegan a una buena conversación con el Gobierno. Por eso vamos a movilizarnos el día miércoles a las 07:00 de la mañana en la puerta Biobío».

Así las cosas, las y los trabajadores de Huachipato aguardan por una respuesta a corto plazo por parte del Gobierno, que permita por lo menos evitar el cierre de una empresa nacional trascendental para el Biobío y todo el país, la que comenzó su desindustrialización con la dictadura y que siguió durante los gobiernos de la Concertación, Chile Vamos y Nueva Mayoría, y viviendo hoy los efectos del desregulado Tratado de Libre Comercio firmado entre China y Chile a mediados de los 2000.