[resumen.cl] Durante la madrugada del miércoles el Liceo Enrique Molina Garmendia se sumó a la medida de presión que llevaba desde un día antes el Liceo Experimental. Ambos liceos fueron tomados por sus estudiantes y posteriormente desalojados. Se movilizan por los persistentes problemas en la infraestructura de sus establecimientos y las insatisfactorias respuestas a sus demandas por parte del DAEM de Concepción.

Las y los estudiantes del Liceo Experimental ya habían sido desalojados la semana pasada, toma que duró dos días, de jueves a viernes, logrando una respuesta insatisfactoria de parte del Director del DAEM, Carlos Mellado Faúndez.

Lea también: Desalojan Liceo Experimental| Petitorio estudiantil da cuenta de problemas graves y persistentes

Así lo describe Génesis Araneda, presidenta del Centro de Estudiantes: "Por el solo hecho de haber levantado una toma logramos una primera respuesta de DAEM de Concepción, que en realidad fue super mediocre: que podríamos arreglar algunas cosas con platas de la SEP y que postuláramos a proyectos como Movámonos, para el cual ya estaríamos fuera de plazo».

Las demandas siguen vigentes: la instalación de un sistema de calefacción y ventilación, la reparación del techo de un pasillo que cedió por la humedad, el sellado de las ventanas del primer piso, terminar con el mantenimiento del escenario del cual se cayó la mitad y que se ha convertido en un microbasural dentro del recinto, la reparación de los aros de básquetbol (que fue soldado en vez de reemplazado, ítem que se considera como solucionado en las respuestas del DAEM); también exigen la reparación del alcantarillado y sistema eléctrico del edificio y que se fiscalicen los trabajos.

«Es una vergüenza que quienes hayan trabajado en los arreglos del liceo nos lo hayan entregado en estas condiciones», denuncia Florencia Sepúlveda, vicepresidenta del CEE del Liceo Experimental, en cuanto al tema del escenario. Los estudiantes reclaman que así como está, en el caso de ocurrir un accidente, «no tendríamos a quién atribuir responsabilidades por al falta de fiscalización en los trabajos», concluye Florencia.

Por su parte, los estudiantes del Liceo Enrique Molina están presionando por lograr la instalación de nuevas redes húmedas y eléctricas, estas últimas deficientes para las necesidades de la población liceana y los recursos tecnológicos con los que cuentan, que tanto les ha costado conseguir y que en caso de un corte de energía los puede dejar inutilizables.

«Decidimos tomarnos el liceo por el hecho de que se han enviado cartas al DAEM y, como siempre sucede, nunca tenemos una respuesta definitiva. En cambio, se comprometieron con enviarnos un ente fiscalizador y que nos confirmarían durante el segundo semestre», denuncia Camilo Araneda, del Colectivo Liceo Enrique Molina.

Algo que reafirma Jonathan Zapata, representante del CEE: «Las autoridades envían respuestas similares a todos quienes enviamos petitorios, entonces no responden a las necesidades de cada liceo, entendiendo que tenemos diferentes problemáticas, por lo que exigimos una respuesta concreta». Y agrega, «aprovechamos de poner más presión por ser dos liceos en toma», en referencia a la solidaridad con sus pares del Liceo Experimental.

La evidente precariedad de los establecimientos municipales de Concepción no parece hacer ruido en la Municipalidad de Concepción. La urgencia para solucionar los problemas exigida por los estudiantes, se  ha encontrado con la acostumbrada prepotencia del DC Álvaro Ortiz, que ha pedido los desalojos de los establecimientos, en vez de solucionar los problemas básicos de infraestructura en los liceos.