[resumen.cl] La vulneratoria normativa presentada por la administración de Sebastián Piñera que permite el control de identidad de la policía uniformada a menores de edad va en contra de todos los acuerdos internacionales en cuanto a los derechos del niño. Es por eso que el gobierno fue denunciado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo internacional que deberá pronunciarse en la materia.

La denuncia fue presentada este jueves ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, para que se pronuncie respecto al proyecto de ley de control de identidad de Carabineros para menores de edad que se discute en el congreso y que vivió su primer trámite de avance en la cámara baja.

Cabe recordar que ya el pasado 13 de septiembre desde la UNICEF, organismo de Naciones Unidas que vela por la protección de la infancia, mafiestaron su total rechazo a la eventual aprobación de este proyecto señalando que «constituye un retroceso en los derechos de la niñez que no se condice con los avances que ha realizado el país en este ámbito».

El organismo señaló a través de un comunicado, que la iniciativa "no avanza hacia la adopción de medidas para la protección de los niños, niñas y adolescentes frente a amenazas de discriminación, y de injerencias arbitrarias y ataques a su honra y reputación". Agregando posteriormente que "Este tipo de medidas no está vigente en casi ningún país de la forma en que se busca incorporar en la legislación nacional (...) Las legislaciones revisadas, no contemplan controles preventivos de identidad, por lo que sería inédito ampliar este control sin causa, el cual no se ha establecido ni para los adultos en otras legislaciones del mundo". 

Finalmente, el organismo reitera que "la aplicación del Control Preventivo de Identidad para adolescentes a partir de los 14 años, contraviene los principios de la Convención sobre los Derechos del Niño y de otros tratados internacionales suscritos por Chile, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención Americana sobre los Derechos Humanos".

La denuncia ante la CIDH fue presentada por representantes de las Juventudes Comunistas, del PRO y de la «Izquierda Cristiana».