Laraquete fue además de una caleta de pescadores con abundancia de recursos marinos y un balneario privilegiado en el Golfo de Arauco, una zona de apareamiento de ballenas, hasta hace menos de un siglo. Afirmar esto hoy, es hablar de un mito, la comuna que por décadas se ha visto afectada por una de las peores formas de contaminación: las empresas de celulosa y las industrias termoeléctricas.

La planta de Celulosa de Horcones produce 770 mil toneladas métricas anuales de pulpa blanqueada de eucaliptus y pino. Durante décadas se han emitido toneladas de dioxinas y furanos, además de compuestos clorados, sustancias venenosas y tóxicas capaces de originar graves trastornos de salud. El pestilente olor de los gases tóxicos, es la percepción de los riles y desechos vertidos al aire, cursos de agua y al mar, que afectan a los pueblos y localidades del Golfo de Arauco, principalmente a Laraquete, Carampangue, Ramadilla y Arauco, que colindan con la planta de celulosa que CELCO tiene en el sector de Horcones. Pero este daño medioambiental también se ha hecho sentir en Curanilahue, Lota, Coronel y San Pedro. Dos emergencias por fuga de trementina en el mar (2004-2005), generó una mortandad de peces y mariscos en el Golfo de Arauco, además de una nube tóxica que llegó hasta San Pedro, y que provocó la internación en hospitales de más de un centenar de personas en Lota y Coronel, incluidos niños de distintas escuelas de estas ex comunas mineras.

Por ello el aumento del cáncer y otras enfermedades crónicas, como las neuralgias, insomnio, náuseas, irritaciones oculares y respiratorias, entre otras, son atribuidas, por los habitantes del sector, a la presencia de la fábrica productora de pasta de celulosa. Vecinos del sector señalan su incidencia en las malformaciones y problemas neurológicos de los niños.

Los pescadores han efectuado diversas denuncias, en instancias judiciales y gubernamentales, sin embargo, los resultados son nulos. Hoy los pescadores de la caleta deben arriesgarse saliendo mar afuera a cada vez  a mayor profundidad para extraer los mariscos, con el daño que significa para su salud y el peligro para su propia vida.

Terremoto Ecológico el 27 de febrero 2010

Durante el terremoto del 27 de febrero, vapores químicos generaron una nube en torno a la planta de celulosa Arauco, vecinos señalan que hubo vertimientos al río. Un vapor inundó las cercanías de la planta de celulosa, los pobladores sentían dolor al respirarlo, los mismos trabajadores abandonaron la planta tras el sismo por el temor a un nuevo derrame de trementina como el producido hace una década.

En varias otras ocasiones pescadores y vecinos del sector han denunciado vertimiento de químicos a los cursos de agua y mortandad de peces en los ríos. Tan solo ver las situación de los campos en torno a Horcones y Carampangue, el color ceniza que inunda el paisaje da una clara señal de los niveles de contaminación que afectan al sector.

El inicio del fin: La llegada de la Termoeléctrica

La Celulosa ha ido incorporando una serie de otras industrias a su planta de Horcones, como aserraderos de paneles e industrias químicas que aumentan la contaminación del sector. Sin embargo, ahora el peligro es mucho mayor, desde el año pasado diversos inversionistas han señalado estar interesados en la construcción de una Planta Termoeléctrica en base al carbón.

Es impresionante la cantidad de riqueza que genera el negocio de la celulosa, es cuestión de ver las utilidades del grupo Angelini, sin embargo, Laraquete es una localidad además de contaminada, muy pobre.

Alcantarillas Colapsadas

Vecinos de la población El Bosque de Laraquete han denunciado por años que el sistema de alcantarillado está colapsado, por lo que los excrementos se devuelven a las casas. Ellos no cuentan con alcantarillado, solo un sistema de fosas que no da la capacidad para las 150 familias que habitan el sector. Muchos de quienes aquí habitan construyen la fortuna del grupo Angelini.