[Resumen.cl] Las destempladas reacciones del gobierno ante las acciones de los y las estudiantes secundarios que pusieron en entredicho la realización de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) correspondiente al año 2019, vienen a confirmar que la única respuesta que tienen los gobernantes frente a cualquier movilización social es la represión y la coerción. Voceros estudiantiles como Ayelén Salgado y Víctor Chanfreau son amezados con la ley de seguridad del estado, entre otros/as estudiantes. Víctor es nieto de Alfonso René Chanfreau Oyarce, dirigente del MIR detenido desaparecido desde el 30 de julio de 1974 en Santiago.

Alfonso René Chanfreau Oyarce, dirigente del MIR detenido desaparecido desde el 30 de julio de 1974 en Santiago.

Alfonso Chanfreau era estudiante de Filosofía de la Universidad de Chile, casado, una hija (Natalia). Lo detuvo la DINA en su vivienda de la comuna de la actual comuna de Independencia y lo llevaron a Londres 38. Alfonso tenía 23 años. Víctor tiene 18.

Víctor, es hijo de Natalia Chanfreau, era estudiante del Liceo Manuel de Salas, de donde egresó este año recién pasado; hace dos años decidió invertir el uso de sus apellidos como homenaje a su abuelo. Víctor es vocero de la ACES.

Alfonso fue dirigente secundario en el Liceo mixto y experimental Gabriela Mistral, de Independencia; luego, en 1968, fue dirigente de la Federación de Estudiantes Secundarios (FESES) de Santiago. Ya en el Pedagógico de la Universidad de Chile, y militando en el MIR desde 1969, se convirtió en jefe del GPM 5 (Grupo Político Militar 5) del MIR en Santiago, y en 1973 miembro volante del Comité Central de esa organización. Luego del golpe militar, Alfonso siguió luchando en la clandestinidad, organizando resistencia contra la dictadura, hasta su detención.

Si bien, abuelo y nieto son protagonistas de sus tiempos, la similitud histórica no puede pasar desapercibida. Es más que una coincidencia. Es la consecuencia de una conciencia forjada al interior de una familia con un fuerte compromiso político y social.

Compromiso que, además, ha sido acerado por la incesante lucha familiar por encontrar verdad y justicia respecto al crimen de que fue víctima el joven luchador Alfonso. La búsqueda de sus restos sigue siendo una lucha que no encuentra respuesta ni paz. La lucha por justicia, solo ha recibido una mueca como respuesta por parte de una justicia tardía e inoperante.

En abril del 2015 la Corte Suprema condenó a cinco agentes de la ex DINA como responsables de la detención y desaparición de Alfonso. Las penas fueron a 10 años de presidio. Tres de esos condenados murieron sin cumplir la condena: Manuel Contreras, Marcelo Morén y Basclay Zapata; uno, Miguel Krasnoff, permanece recluido en Punta Peuco; el otro, el ex oficial de carabineros Víctor Ricardo Lawrence Mires, permanecía prófugo de la justicia.

El estado es cómplice y partícipe de esta grosera impunidad pues el criminal ex oficial de carabineros recibe de su institución su sueldo mensual como oficial retirado todos los meses; de modo que la explicación de que no puede ser habido no es explicación sino burla.

Este criminal, Lawrence Mires, conocido como el «cachete grande», está condenado en varias causas de delitos de lesa humanidad y permanecía en condición de prófugo, con la complicidad evidente de la misma institucionalidad que no vacila en reprimir a estudiantes secundarios, a jóvenes dirigentes, incluidos menores de edad. El «cachete grande» es responsable de la detención y desaparición de decenas de prisioneras y prisioneros políticos. Se hizo conocido por su extrema crueldad y cruentas torturas. Una gran parte de las víctimas de la llamada Operación Colombo fueron capturadas por el grupo águila que dirigía este individuo y sufrieron los tratos inhumados y degradantes de los torturadores «los guatones».

Después de años Profugo el criminal de lesa humanidad se entregó este 10 de enero de 2020 al OS-9 de Carabineros.