[resumen.cl] La diputada RN, Karin Luck, y el diputado designado UDI, Cristián Labbé (hijo del torturador), acusaron a 12 constituyentes de recibir el exiguo pago del IFE que se deposita automáticamente al estar en el Registro Social de Hogares, en un nuevo intento de desprestigiar a la Convención Constitucional, pero desconociendo cómo funciona una política de su propio gobierno.

La derecha y ultraderecha política pasó a la ofensiva en sus intenciones de desprestigiar a la Convención Constitucional y así, intentar salvar la Constitución de la dictadura, ataques que han sido secundados acríticamente por los grandes medios de comunicación.

El último de ellos consistió en acusar a 12 constituyentes de recibir el pago del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), programa de ayuda social calificado por la población como insuficiente, debido a sus montos y tardía implementación,  casi un año después del inicio de la pandemia.

Para puntualizar, el IFE es un pago que se deposita de manera automática por grupo familiar inscrito en el Registro Social de Hogares (RSH).

En este sentido es que la convencional Valentina Miranda (PC), la primera en referirse a este nuevo pataleo de la derecha, comentó que, «la titular de este beneficio es mi madre, de quien fui carga por ser estudiante universitaria», explicando que figuran juntas en el RSH y que es ella quien recibe el pago.

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«Mi núcleo familiar lo compuse con mi madre, cesante hace cerca de un año y quien es jefa de hogar. Desde la inauguración del IFE, ella recibe este beneficio de manera ininterrumpida por no existir ningún otro ingreso económico en el hogar, como ocurre con millones de personas en nuestro país», agregó Miranda.

Además, reparó en uno de los puntos más criticados desde la población que desea recibir este beneficio, que es la lentitud en la actualización de los datos en la plataforma. En esta línea, Miranda acotó que, «renuncie al Registro Social de Hogares el 19 de agosto, hace tres semanas atrás, a pesar de que esto debió ocurrir de manera automática».

Asimismo, apuntó a la diputada Luck (RN) y a su par designado Cristian Labbé (UDI) autores de la absurda acusación, enfatizando en que «junto con demostrar una profunda ignorancia de cómo opera el sistema de protección social, transparentan un claro interés por manipular la realidad a fin de desprestigiar a la Convención Constitucional».

«Lo que verdaderamente le molesta a la derecha es que las y los pobres, quienes calificamos para el IFE, seamos parte de la redacción de esta nueva Constitución», concluyó en una frase que resume bien el fondo de este ataque.

En una línea similar, la constituyente independiente Constanza San Juan, replicó el ataque indicando que el IFE está asociado a un ingreso familiar y no a ella de manera particular, apuntado además que antes de asumir su cargo, era parte de una familia que pertenece al 40% más pobre de Chile. Expresó que siempre ha tenido «una vida sencilla y que quienes denigran a la Convención no lo entenderían», aludiendo a las distintas posiciones de clase de ambos grupos.

A diferencia de otras instancias de representación como pueden ser la Cámara y el Senado, en la Convención Constitucional hay personas de origen popular, situación que a la que la elite política claramente le molesta y a la que no está acostumbrada, principalmente por desconocer la realidad de la gran mayoría de la población.