[resumen.cl] De una manera poco habitual, la movilización estudiantil en la Universidad Austral de Valdivia, asumió una deriva feminista que las autoridades no se esperaban. En virtud de la situación del docente del Instituto de Bioquímica, Alejandro Yáñez, quien fuera sancionado por acoso sexual contra una funcionaria mediante un irrisorio castigo: sacarlo de la docencia y enviarlo a un laboratorio solo para investigar, estalló la indignación de estudiantes, funcionarios y docentes, como nunca, claustros de institutos, sindicatos, centros de estudiantes, asambleas y grupos organizados se sumaron al llamado para lograr la ejemplar exoneración del docente.

En relación a esta situación, en la Universidad Austral se ha desatado un intenso debate en torno al sexismo y machismo presentes en la academia, si bien han existido avances institucionales, como el establecimiento de una oficina de Acoso, violencia y discriminación y un reglamento que comenzó para sancionar agresiones entre estudiantes y que logró ser ampliado a toda la comunidad universitaria a principios de año, esto es aun insuficiente, los estudiantes requieren mayor puesta al día frente a situaciones intolerables para los tiempos que corren, particularmente denuncian errores en la implementación de la oficina y el reglamento, además de los escasos recursos destinados para ello.

Si nos remontamos un poco a los últimos años, diversas situaciones de acoso y violencia de género dieron la alerta acerca de lo invisible de estos graves actos, desde ese momento organizaciones feministas, pero también los sindicatos comenzaron a denunciar públicamente la indolencia de la institución frente al acoso sexual y las conductas machista, es así como en 2016 se logró la desvinculación del decano de la Facultad de Economía, Jorge Díaz, marcando un precedente que antecede a la potente movilización que hoy se vivencia en esta Universidad.

Hasta este viernes, se han producido paralizaciones y tomas de edificios en la Facultad de Filosofía y humanidades, el campus Miraflores (carreras de ingeniería), el Instituto de Comunicación Social (ICOM-Periodismo), el Edificio de Recursos naturales y forestales, la carrera de Derecho, Artes integradas (Facultad de Arquitectura y Artes), Medicina Veterinaria, la Facultad de Ciencias (Edificio Pugin) y la Facultad de Medicina, todos en evaluación de sus movilizaciones el próximo 2 de mayo.

El petitorio se encuentra en proceso de unificación, pues cada facultad y carrera ha ido construyendo propuestas para avanzar en una modificación reglamentaria que vaya en la línea de la superación del machismo y el sexismo en la Universidad Austral, las asambleas estudiantiles han venido a discutir intensamente las prácticas y usos en que se expresan estas conductas normalizadas, todas ellas como parte del cotidiano en las relaciones entre hombres y mujeres, en un espacio que se pretende democrático y "culto".

La próxima semana esperamos conocer el petitorio unificado y el pronunciamiento de las autoridades, de momento ni la federación ni rectoría han hecho mayores comentarios, la primera solo ha manifestando su apoyo comunicacional a los estudiantes movilizados, y las segundas han expresado -a través de escuetos mensajes- la decisión de exonerar al docente Yáñez, sin detallar las condiciones de su salida.