[resumen.cl] Tras la muerte de Rodolfo Oscar Estivill, de 91 años, quien se pegó un tiro en una de las sedes de los Organismos de Previsión Social en Mar del Plata, luego de gritar su rabia por la pérdida de beneficios de los jubilados, los trabajadores del organismo paralizarán mañana viernes en una de las medidas que pretende frenar el desmantelamiento del sistema previsional argentino promovido por el gobierno de Macri.

«Les voy a pedir que me presten atención: tengo 91 años y no doy más de tanta lucha, estoy cansado. Tengo a mis dos sobrinas que me acompañan y me ayudan, pero ya no puedo», dijo Rodolfo Oscar Estivill, de 91 años, antes de tirar el bastón que llevaba, sacar un revólver y dispararse en la sien en una de las oficinas de los Organismos de Previsión Social. Estivill es parte de los miles de jubilados a los que el gobierno de Macri está obligando a acreditar los documentos que les permitieron acceder a sus pensiones, en lo que ha sido denunciado por la Asociación de trabajadores de los Organismos de Previsión Social, como parte de la privatización del sector.

Para el dirigente gremial del sector Leonardo Fabre, que se les exija este tipo de documento a los ancianos «es una bomba en la cabeza de cualquier jubilado», señaló a Pagina 12.

El medio trasandino afirma que el secretario general del gremio de los empleados previsionales señaló que «Vinieron a destruir el sistema previsional» y alertó también acerca de la disolución del sector verificador de la ANSES y la tercerización de la atención telefónica, donde ya trabajan 3 mil contratados que cobran un tercio de lo que cobran los empleados de planta.

Una empleada de la ANSES presente en el lugar de los hechos indicó que lo vivido «Es producto de la situación que estamos viviendo, de la presión que se siente por los incesantes cambios, la constante revalidación de los trámites que es muy acuciante para los abuelos, que encima muchas veces no saben hacer los trámites»