[resumen.cl] A finales de 1982 el arte político irrumpió en las murallas de Concepción. «Ninguna calle llevará tu nombre«, junto a la clásica imagen del dictador Pinochet, se instalaba como un afiche de resistencia que fue rápidamente difundido y reproducido en el país.

Hace 47 años civiles y militares confabularon la realización de un Golpe de Estado contra el Gobierno de la Unidad Popular y los proyectos políticos del pueblo y la izquierda chilena.

Durante 17 años la resistencia tomaría múltiples formas para derrocar a la dictadura.

Una de estas tiene relación con la utilización de los espacios públicos como espacio de disputa.

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En este contexto, los rayados y afiches se establecieron transversalmente como forma de protesta.

Uno de estos corresponde a una imagen de Pinochet, con lentes oscuros y brazos cruzados, con la frase «Ninguna calle llevará tu nombre«.

Fuente: Tribunadelbiobio.cl

En el libro escrito por Paula Leonor Cisterna Gaete y María Eliana Vega Soto, titulado «Resistencia en blanco y negro: Memoria visual de los 80 en Concepción«, las autoras dan a conocer parte de su historia.

Fue a finales de 1982 que las murallas del centro de Concepción comenzaron a tener este afiche.

El Taller Marca de Concepción -da a conocer la investigación de las autoras- se encontraba detrás de su elaboración.

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Iván Díaz Lavín y Ricardo Pérez Zúñiga, ambos Licenciados en Artes Visuales, realizaron esta intervención de arte político en plena dictadura cívico-militar, previo al desarrollo de las Jornadas de Protesta Nacional.

El Taller Marca, en colaboración con estudiantes de Antropología, generó el afiche a partir de la conocida foto del dictador Augusto Pinochet tomada por el holandés Chas Gerrestsen, agregándole el texto en señal de protesta contra lo que representaba su imagen.

Fotografía: Chas Gerrestsen | fotosiconicas.blogspot.com

Serían cerca de 200 ejemplares los que se pegarían en diferentes puntos de Concepción. En formato blanco y negro con una dimensión de 28×38 centímetros el afiche «adquirió vida propia y empezó a ser reproducido por distintos grupos. Y es que ese era el objetivo. Que se difundiera, que no se quedara escondido«, señalan en su trabajo las autoras.

El Taller, nacido durante 1982, se encontraba en la calle Caupolicán de Concepción, donde el afiche fue construido a pulso.

El impacto fue enorme y en diferentes escalas. La investigación señala que «muchas personas lo despegaban intacto de las murallas para reproducirlo y hacer nuevas ediciones«.

El afiche ha trascendido en la postdictadura, teniendo nuevas apariciones en las calles penquistas.

Afiche ubicado en las afueras del Departamento de Historia de la U. de Concepción, septiembre de 2018.

Afiche en Concepción, septiembre de 2018 | @nachaikillay.

El reflejo de un estado de ánimo, de un sentir, se ha canalizado a través de la lucha contra el olvido.

La resistencia, en sus múltiples formas, fue esencial para el derrumbe de la dictadura cívico-militar.