De acuerdo con la información proporcionada por CONAF, el incendio forestal en Viña del Mar se mantiene activo, se han afectando a una superficie aproximada de 125 hectáreas y un saldo de 130 viviendas destruidas, mientras la cantidad de víctimas fatales se redujo a una confirmada.
Por Alejandro Baeza
La luz de la mañana ha permitido dimensionar el daño provocado por el incendio forestal que continúa activo en una zona densamente poblada, que ha cobrado la vida de un adulto mayor y la destrucción de 130 casas, dejando a otras 400 afectadas.
Desde la Onemi informan de 30 personas lesionadas y 70 que han recurrido a albergues. Mientras la cantidad total de damnificados todavía está en evaluación, según boletín emitido a las 9:30.
Se mantiene la alerta roja y el estado de catástrofe en la comuna.
La municipalidad de Viña del Mar, habilitó los siguientes albergues:
Liceo Guillermo Rivera, ubicado en calle Álvarez N°708; Colegio República de Colombia, ubicado en 10 Norte N°985; Colegio Benjamín Vicuña Mackenna, ubicado en Juan José Latorre N°297; y el Hotel O'Higgins, ubicado en Plaza Sucre; Además, se mantiene habilitado como centro de acopio el Colegio de República del Ecuador, ubicado en calle Etchervers N° 115. Asimismo, se han dispuesto centros de acopio en otras comunas del país.
Desde las autoridades señalan que por ahora, la prioridad es el envío de alimentos y agua, así como pañales para bebés y adultos, toallas higiénicas y alimento para mascotas, señalando que la ropa será una etapa posterior. Además, señalaron que no hay ninguna campaña pidiendo depósitos a cuentas bancarias, por lo que calificaron esos llamados en redes sociales como estafas.
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Trabajan en el lugar 11 brigadas terrestres, 10 técnicos, 4 camiones aljibe, 2 aviones cisterna, 1 avión de coordinación y 8 helicópteros de CONAF; 40 vehículos de Bomberos de Valparaíso, Viña del Mar, Quillota, La Cruz, San Felipe, Llay Llay, Putaendo, Santa María, Los Andes, La Ligua, Zapallar, Cabildo, Petorca, Quilpué, Limache, Villa Alemana, San Antonio, El Quisco, Algarrobo, Santiago, 'uñoa, Quinta Normal, Melipilla, y Talagante. Asimismo, ONEMI ha dispuesto el apoyo de tres helicópteros.
Vecinos de Forestal Alto y de Nueva Aurora han señalado a los medios de comunicación que el fuego habría comenzado en plantaciones de eucalipto.
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Estudios previos han determinado que las partículas de incendios forestales pueden ser más peligrosas para la salud que las del ambiente urbano porque contienen más compuestos tóxicos (hidrocarburos aromáticos policíclicos, quinonas, aldehidos y óxidos de nitrógeno) a altas temperaturas y con un tamaño muy pequeño.
El humo de los incendios forestales contiene aerosoles contaminantes y material particulado fino (menos de 2,5 micrones) material particulado ultrafino (menos de 1 micrón), incluyendo microparticulas nocivas de alquitrán.
Por otro lado, Antonio Lara, Ingeniero Forestal, profesor de la Universidad Austral de Chile e investigador principal de Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, publicó una columna de opinión en CIPER Académico donde señala que «los incendios son indeseables y traen grandes pérdidas. La más grave es la pérdida de la vida humana, o bien, las personas que resultan heridas, quienes pierden sus viviendas, sus pertenencias, sus medios de producción, las plantaciones, aserraderos, los bosques nativos, la biodiversidad, los servicios ecosistémicos y un largo etc.»
El Informe a las Naciones de Incendios Forestales en Chile del CR2 señala que las plantaciones forestales son el tipo de vegetación que en términos de porcentaje, más ha incrementado su superficie quemada anualmente. Estas plantaciones «representan el 50% del área de los megaincendios, es decir, aquellos que consumen más de 10.000 hectáreas. Entre 1985 y 2018, este tipo de eventos han quemado 444.000 hectáreas en Chile».
Esta quema de biomasa puede generar devastadores impactos ambientales. El humo produce enormes cantidades de aerosoles y gases. Estas emisiones pueden causar grandes problemas para la salud y la visibilidad, así como incidir en el clima a nivel local y global.
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Las grandes cantidades de material particulado y ceniza emitidas, junto a la particular peligrosidad del finas partículas de alquitrán, son altamente nocivas para la salud respiratoria y cardiovascular.
El humo de los incendios forestales contiene aerosoles contaminantes y material particulado fino (menos de 2,5 micrones) material particulado ultrafino (menos de 1 micrón), incluyendo microparticulas nocivas de alquitrán. Éstas pueden entrar en los pulmones y alcanzar los alvéolos, pasando al sistema circulatorio.
Estudios previos en distintos países han revelado que la exposición al humo provoca mortalidad prematura, asma y reducción en la función pulmonar.
Cada temporada estival, más territorios del centro sur de Chile y Wallmapu, sufren por la megasequía y voraces incendios forestales que destruyen todo a su paso. Comunidades e investigadores/as apuntan a la industria forestal como uno de los principales responsables, junto a un Estado incapaz de prevenir y contener estas catástrofes.
Hasta ahora, varias investigaciones han descrito que la estructura homogénea o uniforme, característica de la composición de las plantaciones de monocultivos forestales de pino y eucalipto para uso comercial pueden promover una mayor dispersión del fuego al presentar abundante, inflamable y bien conectaba biomasa como combustible para la quema.
Investigadores han advertido que en el futuro, la coincidencia de condiciones cálidas y secas en un contexto de cambio climático, en conjunto con paisajes dominados por densas plantaciones inflamables y ricas en combustible podrían incidir en la propagación de incendios forestales cada vez más devastadores.