Casi tres semanas en huelga cumplen trabajadores de la empresa de transportes Pipau. Exigen mejores condiciones laborales y aumentos salariales ya que sufren de sobrecarga laboral tanto en la conducción como en el reparto de la carga y no pago de horas extras. Además relatan sufrir una serie de abusos laborales y prácticas antisindicales. En la sucursal de Talcahuano en la avenida Golondrinas en el límite con Hualpén, los trabajadores exigen que el dueño de la empresa se apersone en el lugar para resolver la situación. Acusan negativa de dialogar, y que solo han recibido amenazas de despidos.

Por: Alberto San Martín

En conversación con Resumen, Sergio Aravena, presidente del sindicato Pipau relata que llevan casi tres semanas en huelga «la empresa no ha cedido casi en ningun punto, no quiere ceder en horas extra, no quiere ceder en sobre esfuerzo, mantiene una postura negativa contra nosotros. Ya últimamente nos han amenazado de despido sino aceptamos el petitorio de la empresa que son prácticamente puras migajas, nosotros queremos que se haga presente el dueño de la empresa, que nos venga a dar alguna explicación, hasta el momento nadie viene para acá, necesitamos ayuda»

Sergio explica que los trabajadores están afectados en el tema monetario «porque aquí ningún día es cancelado a ninguno de nuestros compañeros». «Estamos peleando por temas económicos, mejoras en el tema de horas extras y sobre esfuerzos. Nosotros entregamos cosas que sobrepasan los 100 kg, subimos a cuarto o quinto piso» relata.

Aravena indica que les bajaron el aguinaldo de 60 mil a 20 mil pesos sin ninguna explicación, y denuncia que «Hay choferes que manejan casi 14 horas, van a Arauco, Cañete, Tirúa, Lebu, Contulmo, son rutas largas» explica. «Los dejan desamparados cuando llegan en la noche aquí» señala.

Por su parte, Manuel Letelier, trabajador hace más de 10 años de la empresa explica que «nuestros derechos han sido vulnerados desde el primer año. No pagándonos horas extra, haciendo sobre esfuerzo, tenemos muchos compañeros con licencia más de un año, un compañero con el hombro hecho pedazos» explica.

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Manuel relata el caso de un compañero de trabajo que chocó y quedó con su pierna destrozada. «Lo desvincularon, le pagaron lo que quisieron, que fue una migaja, cuando él quedó casi minusválido».

«Ellos quieren tirarnos un bono de término de conflicto de 300 lucas, lo que no cubre en nada estos 17 días» indica Manuel.

El presidente del sindicato Sergio Aravena reitera que «Queremos que el dueño de la empresa se haga presente aquí que venga y converse con nosotros porque prácticamente estamos recibiendo amenazas que vamos a ser todos desvinculados de la empresa si no paramos la huelga»

Sergio anuncia que van a continuar con su movilización «Tenemos lleno de denuncias en la inspección del trabajo por prácticas antisindicales, y queremos que sean remunerados todos los días que hemos estado en huelga» concluye.