[resumen.cl] Un revés para la política impulsada contra la población migrante se vivió luego de denuncias por la expulsión masiva de personas que contaban con recursos de amparo con resolución pendiente. De parte de la Corte Suprema, instruyeron a las Cortes de Apelaciones que deberán sesionar en horarios inhábiles si la situación lo amerita.

Los fines de semana han sido los días utilizados por el gobierno liderado por Sebastián Piñera para proceder con la expulsión de personas migrantes bajo su política planteada como de «regulación migratoria», vulnerando lo que las organizaciones sociales han planteado como un derecho humano.

En la misma línea, a inicios de semana diferentes oficinas de la ONU plantearon su preocupación por dicho procedimiento, teniendo como referencia la expulsión de 56 personas de nacionalidad venezolana el domingo pasado pese a que algunas de estas contaban con un recurso de amparo cuya resolución estaba pendiente.

Las denuncias han desencadenado diversas críticas sobre las decisiones impulsadas por el Ejecutivo, vulnerando, acusan organizaciones, los derechos humanos de la población migrante.

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En este contexto, el pasado jueves Guillermo Silva Gudenlach, presidente de la Corte Suprema, instruyó a las Cortes de Apelaciones de Chile que deberán sesionar en horas inhábiles frente a la interposición de recursos de amparos cuya atención sea urgente, adoptando todas las medidas necesarias para ello.

De parte del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Sergio Micco, su director, indicó que «el gobierno ha realizado expulsiones masivas de migrantes los fines de semana, lo cual deja a esos migrantes en la total indefensión, todo ser humano tiene derecho al debido proceso», por lo que la instrucción de la Corte Suprema permitiría reposicionar el derecho a la defensa para las y los migrantes que se encuentren en dicha situación.

Fotografía principal: Radio U. de Chile