[resumen.cl] Desde 2013, en la precordillera de Yungay, un fundo de 561 hectáreas fue entregado por Bienes Nacionales en concesión a la Universidad de Concepción para objetivos de investigación, uso público, conservación y manejo del bosque nativo a cargo de la Facultad de Ciencias Forestales. Hace poco más de una semana Resumen hizo públicas las denuncias de diversos campesinos/as del sector debido a lo que consideran tala ilegal de bosque nativo, pésimo manejo del predio y malas relaciones con la comunidad, por parte de la casa de estudios. En conversación con nuestro medio, Luciano Perez del Comité Pro Defensa de la Fauna y Flora (CODEFF) también entrega elementos que hacen cuestionar la supuesta "sustentabilidad" del proyecto ejecutado por la Universidad de Concepción en la zona.

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El terreno de propiedad estatal que está en la polémica fue entregado a la Universidad de Concepción por una concesión de uso gratuito, por un período de 10 años, para crear un supuesto Centro Internacional de Agroforestería. La agroforestería es un sistema que integra árboles, ganado y pastos en una misma unidad. Este modelo está orientado a ser ecológicamente sustentable, pero a la vez tener una productividad económica para la sociedad. Entre sus beneficios está proteger el suelo y el agua, así como capturar el carbono atmosférico con el objetivo de intentar mitigar el cambio climático, entre otras funciones ecosistémicas y sociales. Sin embargo, diversos actores de la comunidad del sector cuestionan que esto realmente se este llevando a la práctica.

Al respecto entrevistamos a Luciano Pérez de CODEFF organización dedicada a la conservación de la Flora y la Fauna en el país. Pérez explicó que "al parecer hay tala de arboles añosos de más de 100, 200 y 300 años describen los vecinos. Y la preocupación nuestra como Comité Pro Defensa de la Fauna y Flora tiene que ver porque estamos dentro del área de influencia de una reserva de la biosfera, estamos muy cerca de todo el corredor biológico que se creó para la protección del huemul".

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El entrevistado además explicó que "estamos en una zona de transición, y para nosotros todo lo que rodea este corredor tremendamente valioso para el huemul, en este minuto podría estar manejado de manera discutible y cuestionable. Lo que los vecinos nos han manifestado es que ellos no tienen acceso al área, y eso con certeza nosotros podemos verificarlo en terreno, porque está completamente cerrado el predio, a diferencia de lo que indica el letrero que dice que es un predio abierto, cosa que en este minuto no se estaría cumpliendo. Pero, además ellos denuncian que el lugar es permanentemente explotado con distintas técnicas y supuestamente con distintos estudios, pero el tema es que se estaría atacando a arboles añosos".

En virtud de la importancia de este bosque el entrevistado explicó que "estamos preocupados porque acá está el carpintero, y hay muchas otras especies como el monito del monte, y vamos a tratar de levantar toda la información que sea posible en esta zona para ver un listado, para ver las especies que están siendo amenazados por esta alteración".

El representante de CODEFF además manifestó que «estamos de parte de los vecinos, hemos escuchado sus demandas, al parecer esto lleva más de un año de manera activa y preocupante, no han sido nunca recibidos, recién ahora hubo una reunión en la cual se dio cuenta de algunas cosas que ellos estarían haciendo, pero la verdad es que un dialogo, una acción conjunta, un desarrollo sustentable con la localidad, no hay".

La Universidad de Concepción cuenta con extensos terrenos de cientos de hectáreas justo atrás de sus instalaciones en la comuna de Concepción, sin embargo en las últimas 3 décadas la casa de estudios ha plantado sucesivas rotaciones de pino y eucalipto sin materializar ningún proyecto real y constante de regeneración ecosistémica de los terrenos.

Como si esto fuera poco actualmente más de 255 hectáreas de dichos terrenos comenzaron a ser urbanizados para el denominado Parque Científico y Tecnológico (PACyT) que en realidad constituye una urbanización masiva del cerro Alto Caracol adyacente a la zona de influencia de la Reserva Nacional Nonguén.

Con este tipo de manejo que ha privilegiado el monocultivo forestal por sobre la conservación de la biodiversidad nativa de los bosques de la zona, resulta paradójico que la casa de estudios apueste por la ejecución de un supuesto manejo sustentable en un sector menos intervenido y tan alejado de sus instalaciones como es la precordillera de Yungay.

La Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Concepción, institución involucrada en la polémica de este terreno en la precordillera, no es primera vez que se ve envuelta en escándalos derivados de supuestos proyectos de reforestación. En el año 2016 la profesora de la Facultad de Ciencias Forestales Mariela Núñez señaló a través de una carta que fue desvinculada tras roces con el entonces decano de la facultad Manuel Sanchez, al cual acusó de tratos vejatorios, prácticas irregulares y malas gestiones en un proyecto de reforestación que involucraba a la empresa ENDESA-ENEL y la casa de estudios. La ex académica de la Universidad de Concepción denunció también en 2016 las cuestionables prácticas que se estaban llevando a cabo en los predios de Yungay en la precordillera.