Son dos meses de constantes denuncias sin soluciones por parte del municipio de Talcahuano las que colmaron la paciencia del estudiantado del liceo Anita Serrano, quienes se tomaron sus dependencias debido a presuntas vulneraciones de derechos y la paupérrima situación infraestructural de su establecimiento, el que sucumbió antes las lluvias de otoño.

Por Juan Contreras Jara

Hongos y hoyos en paredes y techos son parte del panorama que deben soportar las estudiantes del liceo Anita Serrano de Talcahuano, situación que, pese a haberse denunciado en 2019, a la fecha no tiene respuesta por parte del sostenedor, la municipalidad de Talcahuano. Debido a esta situación, este martes parte del alumnado se tomó el establecimiento, acusando total abandono del alcalde Henry Campos (UDI) y la directora del DAEM, Cecilia Aguilera, a quien actualmente subroga Ulises Esparza.

La medida de presión se da en medio cuestionamientos hacia el Departamento de Administración de Educación Municipal por la demora en la licitación de los recursos de emergencia entregados por el Mineduc para la reparación del establecimiento. Hace poco más de un mes, la seremi de Educación del Biobío, Elizabeth Chávez, confirmaba a RESUMEN que fueron transferidos $517.981.000 y que podían haber sido utilizados a través de una contratación directa.

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Fue en abril de este año, que Resumen constató en terreno el deteriorado estado de techumbres, paredes y pasillos, desperfectos que con las primeras lluvias de otoño hicieron aguas. Lo anterior motivó una inspección de concejales y concejalas de la comuna puerto, quienes hicieron hincapié en el abandono del establecimiento bicentenario y la falta de soluciones por parte del municipio de Talcahuano.

Imágenes cedidas por estudiantes afectadas:

Esta lamentable postal orilló al estudiantado del liceo Anita Serrano a tomarse sus instalaciones, exigiendo una reparación profunda de su infraestructura y traslado mientras se trabaja en ella y pasa el invierno. Esto debido a que, si bien aún no entramos de lleno en la temporada de lluvias, las primeras nubadas causaron estragos en techumbres, pisos y paredes.