Juan Contreras Jara / resumen.cl

Desde el pasado martes 10 de julio, los trabajadores organizados en el sindicato N°2 de Cementos Polpaico, de la planta Cerro Blanco ubicada en la Región Metropolitana, mantienen una huelga legal denunciando que la empresa cementera no estaría respetando el piso anterior de termino de negociación, alcanzado hace dos años por los trabajadores. Los trabajadores destacan la intransigencia por parte de los nuevos dueños de Polpaico, el grupo económico Hurtado Vicuña.

Arnaldo García, dirigente sindical de la planta de cementos Polpaico en Coronel y secretario de la Federación de trabajadores del Cemento de Chile, comentó que la exigencia que motivó esta huelga sería; "la distancia que existe con el bono de termino de negociación, que está ofertando la empresa. Este ofrecimiento representa solo un 25% de lo acordado años atrás, o sea la empresa está desconociendo nuestro trato previo".

Además, García denuncia que "a lo largo de esta huelga, la empresa ha utilizado todo tipo de elemento, para mantener el compromiso con los clientes, por lo que ha estado sacando cemento de cualquier parte y de cualquier planta, mostrando así que esta es una batalla perdida por los trabajadores". Desde el sindicato, que representa cerca del 15% de la mano de obra total de la Polpaico, alegan intransigencia por parte de la empresa cementera.

Cementos Polpaico es manejado, desde mediados del año pasado, por el grupo económico Hurtado Vicuña, que además controla acciones en empresas como: Entel Chile, Pucobre, seguros Consorcio Nacional, entre otras. El dirigente sindical explica que luego de adquirir Cementos Polpaico, dicho conglomerado económico "nunca ha querido llegar a un acuerdo con nosotros. Ellos apuestan por doblegarnos y ser intransigentes. Están manteniendo una práctica anti-negociativa, porque su respuesta sigue siendo nula. Cuando se cumplió una semana, no había ninguna propuesta por parte de la empresa, solo el llamado de atención a que depusiéramos la huelga".

Con respecto a las repercusiones que ha tenido en los 162 trabajadores de la empresa cementera, estas casi dos semanas de huelga, Arnaldo García expresa que "a estas alturas, evidentemente hay un desgaste, desmotivación y un menoscabo económico por supuesto. Hasta ahora no ha habido ningún acercamiento con sus trabajadores". García finalizó señalando que "la empresa está apostando al desgaste de esta movilización, pero como federación del cemento en Chile, los seguiremos presionado, para que de una vez se siente a negociar con nosotros.