La experiencia de Hyunh refleja que nos afrontamos a extensiones de las guerras que van más allá del despliegue político-militar o los intereses de quienes respaldan las disputas, arrastrando desplazamientos de comunidades civiles que no buscan participar de los enfrentamientos, pero que son quienes colocan las muertes, las heridas y las memorias.

Por Javier Arroyo Olea

Este no será un análisis de la guerra que duró más de 10 años y significó una profunda derrota para el imperialismo estadounidense. Con esta primera alerta, continúo.

En diciembre de 1996 se transmitió el capítulo titulado «La Navidad de Arnold», parte de la reconocida serie «Hey Arnold» que se mantiene marcada en la memoria de generaciones que encuentran elementos llamativos y significativos en su desarrollo. Música, conflictividades y emociones forman parte de la amplia parrilla de elementos que se rescatan.

Sin embargo, en el capítulo al que me refiero en este breve escrito existe un hilo difícil de abordar, el cual se relaciona a «la decisión más difícil de mi vida», en palabras del Sr. Hyunh, un habitante de la casa de huéspedes sobre quien gira la trama del capítulo.

Sr. Hyunh, Gerald y Arnold | Fotografía: SeriesCN

Y es que Hyunh expone en este capítulo parte de los efectos que las guerras arrastran hacia los pueblos y familias, aquellos que no contemplan las potencias que las lideran.

Así, la memoria del Sr. Hyunh hace afirmarle que la fecha en que se enmarca el capítulo -la Navidad- «siempre parece tan triste», al sufrir la separación de su hija producto de los efectos que arrastró la entonces Guerra de Vietnam.

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De esta forma, nos afrontamos a extensiones de las guerras que van más allá del despliegue político-militar o los intereses de quienes respaldan los conflictos, llegando incluso a desplazamientos de comunidades civiles que no buscan participar de los enfrentamientos, pero que son quienes colocan las muertes, las heridas y las memorias.

Al tratarse de una animación de esta índole -estadounidense, para infancias y que busca dejar una cuota de esperanza-, la experiencia del Sr. Hyunh evidentemente no es la que enfrentan miles de familias en estos contextos. Pero sí nace desde el profundo dolor que conlleva estar en medio de una disputa que cobra la vida de personas por intereses de proclamadas «potencias».

En este sentido, los análisis del abordaje de las guerras no solo deben considerar lo que grandes titulares han adoptado como la movilización de tropas o los efectos económicos de las mismas, sino que tomar en cuenta la actualidad y futuro de aquellas personas que se han encontrado, y encuentran actualmente, en un conflicto que no es el suyo.

Ahí es donde la «cuota de esperanza», la cual mantenía el Sr. Hyunh en baja intensidad, puede, quizá, resurgir y viabilizarse.

Puedes ver el capítulo completo haciendo clic acá.