[resumen.cl] A casi una semana de la toma del acceso a la termoeléctrica Bocamina II, los trabajadores mantienen sus exigencias referidas a la necesidad de que la empresa Enel realice exámenes médicos y se discuta su situación laboral antes del cierre de la central programado para fines de mayo de este año.

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Próximos a cumplir una semana de movilización se encuentran trabajadores subcontratados de la central Bocamina II en Coronel, lo cual se ha materializado en la toma de acceso a la termoeléctrica cuya propiedad es de Enel (ex Endesa).

Los trabajadores han levantado diversas exigencias, entre las cuales resaltan el que la empresa de capitales italianos realice exámenes médicos a quienes se han desempeñado en la termoeléctrica, cuyo cierre se encuentra programado para el 31 de mayo.

Asimismo, exigen igualdad de condiciones laborales y de negociación de salida producto del cierre de la instalación que fue puesta en servicio el año 2012 y utiliza como combustible el carbón.

En contacto con RESUMEN, Iván Cáceres, vocero de los trabajadores subcontratados, indica que llevan ya dos años intentando conversar sobre esta situación con la empresa, pero «todavía no hemos podido instalar una mesa de trabajo para poder efectuar este diálogo con Enel».

En la misma línea, Cáceres explicó que «nosotros somos la clase obrera que hemos trabajado todo este tiempo expuesto a agentes contaminantes, por lo tanto también queremos que se nos reconozca que hemos trabajado en una planta para generar energía para el país, y  también es cierto que hemos sido sacrificados contaminándonos».