Juan Contreras Jara / resumen.cl

Precarias condiciones laborales, pésimos tratos y hostigamiento por parte de los supervisores son algunas de las denuncias que hacen en su segundo día de huelga las y los trabajadores de la empresa CGS Call Center, ubicada en Santiago de la cual su propietario es Pablo Rossel Estay, terno de Sebastían Piñera. Además de ignorar el petitorio de los y las huelguistas, éste pidió el desalojo de las dependencias de la empresa que tuvo como resultado siete personas detenidas. A través de videos, han denunciado el uso desproporcionado de la fuerza y de la propinación de golpes por parte de los efectivos policiales.

En repudio a esta situación, los y las trabajadoras, están denunciando a CGS Call Center con las distintas empresas que contratan los servicios de ejecución y atención de llamadas a ésta. Hoy fue el caso de las clínicas Las Condes y Alemana. "Iremos a cada una de sus mandantes, porque no seremos golpeados de nuevo. Cuando llegamos hoy a la empresa había una enorme cantidad de pacos esperándonos, asi que decidimos denunciarlos con cada uno de sus clientes", comentó Isolina Acosta, presidenta del sindicato hoy movilizado.

La dirigenta agregó que su petitorio se sintetiza en un "reajuste al salario, una bonificación de colación y locomoción de 40 mil pesos, un reajuste de acuerdo al IPC cada seis meses, un bono escolar y de vacaciones, además de flexibilidad horaria para las y los trabajadores que además son estudiantes y que en esta empresa son muchos".

Expuso también que sus reivindicaciones no tienen que ver solo con mejoras económicas o salariales, sino que también con superar las pésimas condiciones laborales que se viven al interior de CGS Call Center. "Somos esclavos del teléfono. No alcanzan a pasar dos segundos y tienes que estar recibiendo otro llamado. No te dejan ir al baño y te descuentan si demoras mucho, sobre 8 minutos. En el edificio ubicado en calle Tarapacá con San Diego, el hacinamiento es tal que no alcanza el baño para la cantidad de mujeres. Las compañeras tienen que ir al mall chino que está a la vuelta de la esquina, lo que implica pasar por el torniquete de salida, que significa horas de abandono, las que son descontadas de los sueldos".

Además, desde el sindicato de CGS Call Center expresaron que éste no cumple con el pago de bonos mensuales de producción, al contrario, sus empleados deben pelearlos mes a mes. Sumado a esto, denunciaron que existen situaciones de amedrentamiento a las personas que pertenecen al sindicato, además de otras prácticas antisindicales efectuadas por dicha empresa.

Entre las empresas a las cuales les presta servicios la empresa de Pablo Rossel, CGS Call Center también están; Chile express, Cencosud, Copesa, Transantiago, Toshiba, Megasalud, Forum, la Cámara del Comercio, Clínica Las Condes, Clínica Alemana, Transbank, CGE, AFC, Chile Compra, Salud UC, Rutas del Maipo, ACHS, Sence, Banco Ripley, Banco de Chile, Entel, Junaeb, entre otras.

Por su parte, la Inspección del Trabajo no se ha pronunciado con respecto a la situación laboral que aqueja a más de trescientas personas que laboran en CGS Call Center. Acosta sentenció que "los hemos llamado y ellos nos e han acercado en lo absoluto. Estuvimos llamando al director regional del trabajo pero dicen que están complicados, que tienen poco personal y nosotros necesitamos que veamos la última oferta de parte de la empresa".

Por lo pronto las y los huelguistas seguirán visibilizando su precaria realidad laboral, en cada una de las empresas que contratan los servicios de dicha compañía de llamadas.